La guía más grande Para Ausencia emocional
Otra consecuencia común es la dificultad para regular las emociones. Las personas que han experimentado cesión emocional pueden tener dificultades para identificar, expresar y manejar adecuadamente sus emociones.
Esta forma de negligencia emocional puede ocasionar una serie de consecuencias negativas en la vida de quienes la experimentan, como problemas de autoestima, dificultades en las relaciones interpersonales y trastornos emocionales.
Experiencias previas negativas pueden ocasionar desconfianza y dificultar la disposición a cobrar audiencia.
Miedo al cambio: Aceptar ayuda implica enfrentarse a situaciones nuevas, modificar patrones de comportamiento y quizás replantearse creencias arraigadas. El miedo al cambio y a lo desconocido puede suscitar resistor a buscar ayuda, incluso cuando se reconoce la necesidad de apoyo.
Sé amable contigo mismo. Muchos tienen esa voz interior crítica que nos dice que somos personas terribles; cuanto antiguamente aprendemos a frenar esta voz y evitar que dicte sus comportamientos, mejor.
Falta de empatía. Es metódico que, si en la infancia no han sido empáticos con una persona y no han atendido sus necesidades afectivas, al ser anciano tenga problemas para ser empático con los demás. Hay quienes pueden conservarse a ser crueles, pero que han crecido con la idea de que los sentimientos no importan. Igualmente puede deberse a una incapacidad para detectar cómo el otro se siente y desempeñarse coincidente a su estado emocional. Por eso, frente a los demás parecen no tener compasión o ser de “hielo”. Realmente todo viene de la falta de experiencia, luego que nunca han intentado ponerse en el zona de otro (pues han pasado que sus figuras de apego no lo han hecho con él).
Por último, el cesión emocional puede tener un impacto duradero en la Vitalidad mental y emocional de la persona. Puede dar lado a trastornos como el trastorno de apego, la depresión o la ansiedad crónica.
Por otra parte, el impacto del renuncia emocional no se limita al mundo interno de una persona, pero que puede moldear significativamente su comportamiento y patrones de comunicación en diversos contextos.
Entre algunos de los síntomas más definitorios del TLP, se pueden encontrar miedo a la crítica y rechazo social, Por otra parte un temor extremo a sufrir un abandono. Quienes padecen este trastorno son bastantes sensibles con respecto a las relaciones con otras personas, aunque que de por sí tienen dificultades para controlar su impulsividad y emociones.
Contar con un entorno de apoyo emocional es esencial para el ampliación personal y la resiliencia. Permite a las personas:
Es importante destacar que el renuncia emocional puede no ser intencional por parte de los cuidadores. Puede ser el resultado de su propia incapacidad para brindar el apoyo emocional necesario correcto a dificultades personales o falta de conciencia sobre las necesidades emocionales del individuo.
Ser emocionalmente esforzado implica asimismo conocer aceptar las emociones y manejarlas correctamente. Significa aceptar lo que sientes en cada momento sin tratar de huir de las emociones negativas mediante licor, drogas, sexo o distracciones que usas para no notar.
El abandono emocional puede socavar la capacidad de una persona para fiarse en los demás y establecer relaciones íntimas y significativas.
La experiencia de la ausencia emocional puede observar tanto en relaciones parentales, de pareja o hasta de amistad, dejando heridas, siendo de básico importancia aprender a here cómo superar el sentimiento de abandono.